ASFIXIA
El sol me despierta con la esperanza de que mi pelo brille.
La casa huele a flores y a café aunque lo ignoro,
estoy acostumbrada a destrozar todo lo que parece firme.
Y mi mirada sigue enseñando lo que infravaloro.
No me digas que no llore, no me digas que no sonría,
todos sabéis que jamas me alejaré de las cosas frías.
Regreso al lado oscuro caminando,
colocada como la chica estúpida que era antes.
Los chicos observan deseando,
que me siente en sus rodillas y me "hidrate".
Las chicas hablan cuchicheando,
sobre mis ojos y mi personalidad brillante.
Vuelvo con cadenas entre mis piernas,
la luna me mira intentando iluminarme.
Apesto a soledad y a lágrimas tiernas,
Mi pecho asfixia con ganas de matarme.
Los gritos son tan fuertes que nadie los escucha.
Caigo vencida por tantas historias de mentiras.
Mi afortunada existencia se deshace en la ducha,
y desnuda recorro pasillos llenos de pesadillas.
No se que dirección tomar,
no se como engañar,
apenas puedo respirar,
juro que yo antes sabia jugar.
Localizarme en lo más alto de los mapas,
antes de saltar en dirección contraria a los vosotros.
El tiempo se mueve a ritmo de mi Karma,
y el canto helado de mi invierno me susurra celoso.
La casa huele a flores y a café aunque lo ignoro,
estoy acostumbrada a destrozar todo lo que parece firme.
Y mi mirada sigue enseñando lo que infravaloro.
No me digas que no llore, no me digas que no sonría,
todos sabéis que jamas me alejaré de las cosas frías.
Regreso al lado oscuro caminando,
colocada como la chica estúpida que era antes.
Los chicos observan deseando,
que me siente en sus rodillas y me "hidrate".
Las chicas hablan cuchicheando,
sobre mis ojos y mi personalidad brillante.
Vuelvo con cadenas entre mis piernas,
la luna me mira intentando iluminarme.
Apesto a soledad y a lágrimas tiernas,
Mi pecho asfixia con ganas de matarme.
Los gritos son tan fuertes que nadie los escucha.
Caigo vencida por tantas historias de mentiras.
Mi afortunada existencia se deshace en la ducha,
y desnuda recorro pasillos llenos de pesadillas.
No se que dirección tomar,
no se como engañar,
apenas puedo respirar,
juro que yo antes sabia jugar.
Localizarme en lo más alto de los mapas,
antes de saltar en dirección contraria a los vosotros.
El tiempo se mueve a ritmo de mi Karma,
y el canto helado de mi invierno me susurra celoso.
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